Hace millones de años, tras una ardua batalla en los cielos, los ángeles derrotados en ella (conocidos como ángeles caídos) juraron vengarse de los ángeles de la peor manera posible. Éstos, por su parte, estuvieron alerta durante siglos...
Hasta que los demonios comenzaron su venganza.
¿Qué había peor para un ángel? Ver su creación destruída. Y los seres de los que ellos estaban más orgullosos eran los humanos... Así que los demonios comenzaron a hacerse con las almas de miles de humanos. Los ángeles acudieron en su auxilio. Nuevas guerras se produjeron entre ellos, destruyendo zonas del planeta Tierra jamás recuperadas.
Los demonios dicidieron retirarse un tiempo, bajo las órdenes del poderoso Lucifer. Los ángeles, por su lado, regresaron al cielo para recuperar fuerzas, a sabiendas de que sus enemigos no los dejarían ir tan rápido.
Con el paso del tiempo, los demonios fueron dejando de actuar bajo las órdenes de su señor. Actuaron por solitario, haciéndose con las almas de más personas. Los ángeles estaban asustados, pues ahora que actuaban solos era más difícil dar con ellos. Su objetivo nunca cambió: los demonios ansiaban tener el control de los humanos. Los enviados del cielo, proteger a las personas.
Pasaron desapercibidos demasiado tiempo...hasta hoy.
El 8 de Julio de 2005, en el pueblo de Grahamon, los ángeles detectaron a un grupo de demonios. Eran cinco: Thomas, Zacarías, Lilith, Mania y Leonard. Ya habían conseguido el control de las almas de todo el pueblo, pero otros cinco ángeles fueron enviados en su auxilio: Santiago, Helena, Isaac, Miriam y Ana.
Tras unos meses de incesables peleas entre ellos, los demonios abandonaron el pueblo, pues la gente comenzaba a "despertar" del hipnotico encanto de los enviados del infierno. Los ángeles también abandonaron en el pueblo.
Un grupo de hechiceros (casualidad o no, también eran cinco) decidieron visitar el pueblo tras haber sido avisados por otros hechiceros de que algo raro había ocurrido en Grahamon. Sus nombres eran Lía, Christian, Morgana, James y Regina. Comenzaron a investigar los rastros de magia demoníaca y angelical, pero no encontraron nada. Ellos ya no estaban. No perdieron la esperanza y se trasladaron a aquél pueblo.
Diciembre de 2009. El grupo de demonios ha regresado a Grahamon para acabar lo que empezó, pero no vienen solos: han convocado a otros demonios a que visiten el lugar y les ayuden con aquella tarea. Los ángeles comienzan a sospechar del regreso de los demonios, por lo que comienzan a merodear de nuevo Grahamon, esta vez con más ángeles por precaución. Los hechiceros comienzan a detectar más rastros y, contentos por el resultado, se reúnen para hacer rituales convocando a los demonios. ¿Darán estos resultado?
Los demonios ya comienzan a embaucar a los humanos del lugar... pero, ¿por qué conformarse con Grahamon pudiendo conseguir las almas de toda la humanidad?